Prevención de la obesidad infantil
Según la OMS la obesidad es la epidemia del siglo XXI. Este hecho tiene graves consecuencias en la calidad y la esperanza de vida de la población. La obesidad está directamente relacionada con las principales enfermedades no transmisibles como la diabetes, las enfermedades cardiovasculares o ciertos tipos de cáncer.
La principal causa de obesidad infantil es el exceso de consumo de alimentos no saludables (snacks, comida rápida) y de refrescos, así como un bajo consumo de frutas, verduras y un descenso de la actividad física.
La prevención de la obesidad infantil tiene diferentes caminos. Tener unos hábitos saludables desde la infancia es una buena práctica para tener una salud física mejor.
Como primer consejo recomendamos hacer 5 comidas durante el día. Primer desayuno, segundo desayuno, almuerzo, merienda y cena. ¡El primer desayuno es muy importante para empezar el día con fuerzas! En cada comida se recomienda comer una pieza de fruta o una ración de verdura, así conseguiremos más fácilmente el segundo consejo, comer 5 piezas de fruta y/o verdura al día, ¡no valen zumos!
Es muy importante comer variado, no consumir bebidas azucaradas ni gaseosas, evitar los alimentos procesados y aumentar el consumo de integrales.
